Generador de ozono agua y aire con lanza y pistola de presión

HIGIENIZACIÓN TOTAL

Sistema profesional para profesionales del sector agroalimentario e industrial que desean higienizar perfectamente las superficies de elaboración sin utilizar productos químicos agresivos. Construido íntegramente en Italia, combina en un único sistema un generador de oxígeno puro capaz de alimentar un generador de ozono de 20 g/h y un sistema de agua ozonizada a alta presión. También dispone de un sensor de detección especial para supervisar, controlar y mantener el grado deseado de saturación de ozono en el entorno.

Aplicaciones en el sector alimentario: marco normativo y aplicaciones. El tratamiento con ozono también fue considerado por la EFSA (2011) en el contexto de un dictamen sobre la descontaminación de canales de pollo potencialmente contaminadas con Campylobacter (EFSA, 2011). El dictamen no destacaba ningún problema específico con el ozono; en general y de acuerdo con otros dictámenes, la EFSA hacía hincapié en que los tratamientos de descontaminación debían considerarse complementarios, y no sustitutos, de las buenas prácticas de higiene en el sacrificio. La CNSA, remitiéndose al protocolo nº 24482 del Ministerio de Sanidad, de 31 de julio de 1996, emitió un dictamen favorable sobre la ozonización de cámaras de curado y/o almacenes. Eficacia del uso del ozono en el sector alimentario. El uso del ozono en el sector alimentario ha sido ampliamente investigado para la reducción de los riesgos biológicos, químicos y toxicológicos de productos específicos que no son aptos para los tratamientos convencionales o para los que dichos tratamientos no son eficaces. Entre las diversas aplicaciones posibles del ozono o del agua ozonizada se encuentran, por ejemplo: i) la reducción de la carga microbiana superficial de productos listos para el consumo, como frutas y hortalizas frescas, con el fin de prolongar su vida útil; ii) la reducción de microorganismos patógenos potencialmente presentes, como Salmonella, Listeria, Campylobacter, E. coli patógena, etc., en materias primas de origen animal (por ejemplo, frutas y hortalizas); iii) la reducción de la carga microbiana de productos que no son aptos para tratamientos convencionales o para los que dichos tratamientos no son eficaces. (iii) la degradación y detoxificación de micotoxinas específicas en cereales; (iv) la degradación y eliminación de residuos de pesticidas en productos hortícolas; (v) el uso como alternativa a los fumigantes para el control de plagas; (vi) el uso para la higienización de superficies y plantas/maquinaria. Varios estudios han evaluado específicamente la eficacia del ozono o del agua ozonizada como viricida en la producción alimentaria o agroalimentaria